Este 14 de mayo, iniciara un nuevo periodo en el poder legislativo. Sin duda alguna, los desafios y responsabilidad que debera enfrentar esta nueva Asamblea Nacional son enormes, y estan marcados por un contexto totalmente diferente al vivido en legislaturas pasadas. Por un lado, la peor crisis sanitaria de los últimos 100 años, que nos ha enfrentado a una realidad en la cual, no todos tienen las mismas herramientas y oportunidades para enfrentarla, y que necesita ser replanteada de cara al futuro. Y, por otro lado, la finalizacion de un ciclo político, de 14 anios, marcado por un autoritarismo competitivo, escandalos de corrupcion, y decisiones erroneas en el manejo de la economia y la emergencia sanitaria.
Frente a esto, es nuestra responsabilidad en la Asamblea Nacional, llegar a entendimientos a su interna, no solo para nombrar a las autoridades del poder legislativo y a los miembros de las comisiones, sino tambien, para dotar al poder ejecutivo de gobernabilidad, que le permita tomar decisiones para atender lo urgente y lo importante. No hace falta hacer enfasis en la necesidad que tiene el ejecutivo para atender la vacunacion de la mayor parte de ciudadanos, y para esto, el legislativo hacer lo que le dicta la constitucion y la ley para facilitar el trabajo del presidente Lasso. Esto requiere de un acuerdo nacional por la gobernabilidad, en el cual, todos los sectores políticos y sociales son fundamentales para su exito.
El trabajo del poder legislativo será fundamental para alcanzar consensos entre las fuerzas políticas que permitan crear las reformas legales necesarias para reactivar la economia, mejorar las condiciones de seguridad y recuperar la confianza en este poder del Estado. Los ciudadanos necesitan de respuestas efectivas que permitan atender sus principales demandas, sobre todo relacionadas con la generacion de empleo. Para esto, no solo basta con una reforma al codigo del trabajo, sino tambien con una reforma al codigo organico de la produccion, comercio e inversiones, ya que la recuperación economica, no solo pasa por generar mayores facilidades para las relaciones laborales, sino tambien para que el pais sea más atractivo para las inversiones.
Respecto a la seguridad, mucho se ha criticado sobre la imposición de nuevas apenas o el aumento de estas, pero no se toma en cuenta que las normas generan incentivos para el comportamiento de los individuos. Es nuestra responsabilidad debatir con base en evidencia empirica, la aplicabilidad de nuevas penas para los delitos más atroces, tales como la violacion a menores de edad y que incluya agravantes. No solo bastara con el trabajo que haga el poder ejecutivo para fortalecer a la Policía Nacional, tambien depende del trabajo legislativo y del sistema judicial, siendo estas funciones independientes, pero que tienen bajo su responsabilidad generar condiciones mas seguras para el país, en el marco de sus competencias.
Sin duda, existen otros temas fundamentales para el pais, y otros que, de acuerdo con la coyuntura, iran emergiendo. Y para esta nueva Asamblea Nacional, en la cual, el 91% de sus integrantes son nuevos, la responsabilidad es enorme. La ciudadania, sin duda alguna estara expectante frente a su labor, y exigira una actitud transparente de parte de sus representantes. Esto sera fundamental, para continuar construyendo una democracia solida, una cultura política que, en el largo plazo, genere mayor confianza en sus instituciones.
Es nuestra responsabilidad, estar a la altura del momento histórico que vivimos.
